Las tazas para sublimación pueden ser un excelente soporte publicitario… o un completo desastre. Todo depende de si eliges la taza adecuada para esta técnica de marcaje.
A simple vista, todas parecen iguales: cerámica blanca, formato estándar, superficie lisa. Pero si no han sido fabricadas con los materiales y tratamientos específicos para este tipo de impresión, el resultado será decepcionante: colores apagados, tinta que se desprende, acabados poco profesionales. Y eso, en una campaña promocional o un regalo corporativo, se traduce en una oportunidad perdida.
En este artículo te explicamos por qué no cualquier taza sirve para sublimar, cómo identificar los modelos adecuados y cuáles recomendamos si buscas un resultado a la altura de tu marca.