La ropa corporativa y el textil publicitario son una extensión de la marca.
Cada prenda que lleva tu logo —ya sea un polo, una sudadera o una camiseta de evento— comunica quién eres como empresa.
Por eso, mantenerlas en buen estado no solo es una cuestión de imagen, sino también de inversión.
En este artículo encontrarás 7 pautas básicas para cuidar las prendas personalizadas y alargar su vida útil, reduciendo costes y manteniendo una presencia impecable en tu equipo o en tus acciones promocionales.
1. Lávala siempre del revés
Este primer paso, aunque parezca simple, es fundamental. Al darle la vuelta a la prenda antes de meterla en la lavadora, proteges el estampado o bordado de los roces con otras prendas, cremalleras o botones.
De esta manera, reduces el desgaste y evitas que el diseño pierda color o se agriete con el tiempo. Un buen truco para no olvidarlo es tener la costumbre de separar la ropa personalizada en la colada y comprobar que siempre va del revés.

2. Agua fría o máximo 30 °C
Lavar con agua caliente las prendas estampadas ocasiona que las fibras se abran con facilidad, lo que a su vez hace que el diseño se deteriore, despegue o decolore.
Teniendo esto en cuenta, lo más recomendable es optar por agua fría o, como máximo, un ciclo suave a 30 °C. Hacer esto protege la personalización y ayuda a que los colores de toda la prenda se mantengan vivos.
Un consejo: revisa la etiqueta de tus prendas para saber qué cuidados específicos necesita. Si quieres entender todos los símbolos de lavado, consulta nuestra guía completa.
3. Nada de secadora (mejor secado al aire)
Aunque la secadora es muy práctica, no es una buena aliada para este tipo de regalos promocionales. La razón es que el calor intenso puede dañar los vinilos, encoger el tejido y hasta deformar los bordados.
Entonces, ¿cómo secar la ropa personalizada? La mejor opción es el secado al aire, preferiblemente en un lugar ventilado y a la sombra. Nunca expongas directamente al sol las áreas personalizadas, puesto que los rayos UV pueden hacer que el diseño pierda intensidad de color.
Y, para evitar que una camiseta con un estampado grande se deforme, puedes colgarla en horizontal sobre una superficie.

4. No planches directamente sobre el diseño
Planchar encima del estampado es algo que hacen muchas personas que reciben estos regalos de merchandising, pero es también uno de los errores más graves. Como mencionamos antes, el calor directo puede hacer que el vinilo se derrita, que la tinta se adhiera a la plancha o que el bordado pierda su forma.
La solución es sencilla: dale la vuelta a la prenda y plánchala siempre por el reverso. Si necesitas planchar la parte frontal, crea una barrera protectora poniendo un paño de algodón fino entre la plancha y el diseño para. También, ajusta la temperatura a un nivel bajo o medio y evita el vapor en las zonas estampadas.
5. Usa detergentes suaves y olvídate de la lejía
Los detergentes agresivos y, sobre todo, la lejía, son capaces de arruinar rápidamente el acabado personalizado, deteriorando los colores y debilitando las fibras del tejido.
Entonces, diles no a estos productos químicos y, más bien, elige detergentes suaves, preferiblemente líquidos que disuelven mejor en agua fría y son menos abrasivos. Y, si hay una mancha difícil, los mejor es tratarla con un quitamanchas específico para ropa delicada y no uses lejía.

6. Evita frotar o cepillar la zona personalizada
Cuando se mancha el área del diseño, lo natural es querer frotar. Sin embargo, hacerlo con fuerza o con un cepillo puede desgastar el estampado y provocar que se levante o se agriete.
En su lugar, aplica un poco de detergente suave directamente sobre la mancha y deja que actúe unos minutos. Después, lava la prenda normalmente (recuerda: del revés y en agua fría). Si la mancha persiste, repite el proceso.
7. Si tienes dudas, trata la prenda como si fuera delicada
En caso de dudas, una regla de oro es tratar cualquier ropa personalizada como si fuera un tejido delicado. Aunque sea una camiseta de algodón o una sudadera resistente, el diseño necesita cuidados similares a los de prendas finas como la seda o la lana.
Esto quiere decir que tienes que lavarla en programas suaves, evitar sobrecargar la lavadora, no usar secadora y guardarla de forma adecuada.
Con estos pequeños hábitos en el lavado y cuidado diario, tu ropa personalizada podrá acompañarte durante años, manteniendo no el tejido en buen estado, así como su valor emocional o profesional.

Codés
Mi nombre es Codés (lo sé, nombre peculiar donde los haya), soy publicista de formación y copywriter de profesión.
En esta etapa laboral he tenido la suerte de dar con Grupo Billingham, una de las empresas de referencia en el sector de los regalos personalizados y artículos publicitarios. Aquí me encargo de crear artículos relacionados con los regalos publicitarios, personalizados y de merchandising con el objetivo de que sean útiles y prácticos para nuestra audiencia, ¡cosa que me encanta! Los viajes y la lectura son dos de mis grandes pasiones, ¡siempre me verás planeando el próximo viaje con un buen libro bajo el brazo!
