El consumismo es una de las características de nuestra sociedad. Y es que la publicidad nos impulsa a comprar y comprar, muchas veces aunque el producto que se adquiera no satisfaga una necesidad real. Por eso, y para cambiar esta realidad, ha surgido el consumo ético, una forma diferente de consumir que es especialmente amigable con el planeta.
Si antes no has escuchado hablar del término, no te preocupes, lamentablemente aún no es del todo conocido, por ello, preparamos este post donde te explicamos qué es y cómo puede beneficiarnos.
¿Qué es el consumo ético?
El consumo ético es aquel que se basa en analizar el impacto que tendrá el producto en cuestión sobre el medio ambiente, las especies animales y las personas. Actualmente cuando vamos a hacer una compra, por lo general se piensa en si el producto en cuestión nos gusta y si podemos pagar su precio, pero no se analiza lo que está detrás de su producción y consumo, es decir, a quién afecta y de qué manera lo hace.
Entonces, consumir de forma ética podemos decir que sería un pensar antes de comprar. Detenernos a estudiar qué impacto ambiental tiene la manufactura y el uso del producto y si en realidad lo necesitamos.
Esto es, no solo comprar con los ojos, sino hacerlo con la cabeza y, de ser posible, comprar artículos de segunda mano.
Características del consumo ético
El consumo ético se basa en tres claves:
- Comprar solo lo que se necesita,
- ser clientes de marcas que no impactan negativamente en el ambiente
- reciclar, reusar y revender.
Comprar solo lo que se necesita: el principal aspecto que quiere cambiar el consumo ético es la tendencia que tenemos de comprar sin que haya una necesidad latente que satisfacer.
Este es el caso, por ejemplo, de los teléfonos móviles. Puede que una persona tenga un móvil de última generación que le va bien para sus tareas diarias, pero la publicidad anuncia que salió uno aún más nuevo. ¿Qué hará esta persona? Querrá cambiar de teléfono y comprará el más reciente, aunque no le haga falta.
Ser clientes de marcas que no impactan negativamente en el ambiente: no todas las marcas pueden decir que son amigables con el planeta, porque sus procesos implican el uso de ingredientes químicos, la contaminación o el mal uso del agua. Sin embargo, hay otras marcas que son eco friendly y el consumo ético nos dice que a estas a las que hay que comprar.
Reciclar, reusar y revender: generalmente, cuando se habla de reciclaje se piensa en papel, platico o vidrio, pero hay muchas cosas más que puedes reciclar y reusar en tu día a día. Si ya no piensas darle uso, en lugar de botar lo mejor es revender para que otras personas le saquen provecho a lo que ya no satisface tu necesidad.
Beneficios del consumo ético
El principal beneficio del consumo ético tiene que ver con el cuidado medioambiental, ya que se estaría consumiendo solo lo que hace falta, se genera menos contaminación y se saca provecho de ingredientes y procesos que no tienen impacto en el planeta.
Además, de las características anteriores desprendemos el hecho de que puedes ahorrar dinero, ya sea porque reutilices tus cosas o porque compres productos de segunda mano que son más económicos que los nuevos.
Asimismo, cuando nos convertimos en clientes de pequeñas empresas que en sus procesos de producción y distribución son responsables con el ambiente, estaremos dándoles la oportunidad de surgir y con ello de consolidarse en alternativas ante las marcas más poderosas. Esto sin dejar de lado que se estaría favoreciendo al comercio local, a los pequeños productores y, con ello, cooperando al desarrollo de nuestra economía.
El consumo ético y los regalos de empresa
A lo largo del año, hay distintas épocas o temporadas en las que es buena idea hacer obsequios a los trabajadores, pero una forma de hacerlo de forma responsable es con regalos de empresa ecológicos, aquellos que son fabricados con materiales reciclados y que no contaminan el ambiente.
Por darte algunas ideas, puedes regalarle a tus empleados o proveedores, mascarillas ecológicas, libretas de cartón reciclado, abanicos de tela de corcho y madera, camisetas, mochilas y bolígrafos.
Todos estos regalos se relacionan con el consumo ético siempre y cuando estén hechos con materiales reusados y que una vez vayan a desecharse, puedan ser reciclados. Al regalarlos, ayudas a los demás a también ser responsables a la hora de consumir.
Iara
¡Hola! Si has llegado hasta aquí, seguramente te interese saber más sobre mí. Me presento: soy Iara, me especializo en la creación de contenidos, el Online Marketing y la usabilidad. En Grupo Billingham creo contenido sobre las tendencias en regalos publicitarios, las novedades de nuestro catálogo, sostenibilidad en el sector de los regalos de empresa, etc. Por supuesto, mi gran hobby es escribir, pero también disfruto de hacer cualquier tipo de deporte (volley, yoga, boxeo, senderismo…) y de viajar. Ahora que ya sabes más de mí, te animo a leer algunos de los siguientes artículos.
